Nuestro mundo históricamente ha cambiado dramáticamente a lo largo de los años, y estos cambios marcaron el comienzo o el final de varias fases. Por "revolución" entendemos un cambio repentino y completo. Como explicó el economista y empresario alemán Klaus Schwab en el Foro Económico Mundial.
Todos estos cambios comenzaron en la segunda mitad del siglo XVIII:
¿Sabías que para fines de 2020 habrá más de 30 mil millones de dispositivos conectados a Internet?
Teniendo en cuenta este mercado potencial, la iluminación inteligente parece ser uno de los segmentos de más rápido crecimiento.
Aún así, hemos visto un gran progreso desde que pasamos de las bombillas tipo Edison a las lámparas fluorescentes y a la tecnología LED, que ahora es una alternativa a la iluminación "tradicional". El siguiente paso son las bombillas inteligentes.
Pero, ¿qué es la iluminación inteligente?
En definitiva, nuestras lámparas, además de la tecnología LED, nos aportan luz cuando y donde queramos o necesitemos. Con el simple hecho de ser LED conseguimos un menor consumo, además de poder controlar la iluminación, podemos ahorrar cerca del 90% de nuestra factura de la luz.
No necesitamos instalaciones especiales, basta con tener nuestras luminarias y focos inteligentes, las apps en las que se integrarán y el internet que tenemos en casa. Además, son extensibles, ¿qué significa eso? Podemos añadir tantos dispositivos como queramos en cualquier momento, lo que nos permite desequilibrar fácilmente incluso nuestros bolsillos ya que no requiere una gran inversión.
Cuidar lo sostenible: una responsabilidad.
Uno de los factores que impulsan la iluminación inteligente es el sector medioambiental. Vivimos en la sustentabilidad día a día, y cuando usamos tecnología tenemos la obligación de ir de la mano con el cuidado del medio ambiente. Por eso integramos la tecnología para mejorar nuestra vida diaria y hacerla extraordinaria.
¿Te imaginas poder controlar la iluminación inteligente como quieras?
Ahora se puede operar a través de una variedad de opciones: a través de una aplicación, un control remoto, los interruptores tradicionales que tenemos en nuestros hogares e incluso a través de un asistente de voz inteligente. Esto incluso aumenta nuestra productividad.
Además, una de las principales características es que contamos con acceso remoto, es decir: sin importar dónde estemos, podemos cambiar las luces inteligentes de nuestro hogar, crear escenas y horarios para encenderlas o apagarlas en momentos específicos.
El principal beneficio de la iluminación inteligente es que podemos tener un hogar más dinámico, por lo que la misma experiencia en el hogar será más placentera. Ahora que lo pienso, ¿qué tal si reemplazamos todas las luces de los sillones de nuestra sala de estar?
Además de poder adaptar la potencia necesaria en la vivienda, obtenemos un ahorro económico al usar solo la potencia que necesitemos en cada caso.
Iluminación inteligente
¿Cómo le afecta la luz?
La iluminación de nuestro hogar tiene el poder de afectar a los mismos muebles, decoración, arquitectura e incluso a nuestra forma de vida ya nosotros mismos.
Con 16 millones de colores y 64.000 tonos de blanco, podemos tener una gran versatilidad, además de controlar la intensidad para crear el ambiente perfecto para cada estancia y cada momento.
Al igual que las luces inteligentes, tienen una micromemoria que aprende sobre nosotros todos los días, lo que puede alertarnos de seres extraños; cuando salimos tarde de casa y regresamos tarde, podemos activar un modo "vacaciones" que permite que nuestras luces simulen cuando No re casa Nuestra presencia en la mañana, tarde y noche.
Otra gran ventaja: el despertador perfecto, programamos la iluminación inteligente a determinadas horas, y nuestras luces se van encendiendo poco a poco, para que nos despertemos tranquilos y de la forma más agradable posible. O por el contrario, si nos cuesta conciliar el sueño por la noche, podemos programar las luces inteligentes para que vayan atenuando poco a poco hasta apagarse por completo, ayudándonos a tener periodos de descanso más prolongados.
De esta manera obtenemos un ahorro de luz importante además de adaptar la iluminación a nuestras necesidades.
¿Luz de trabajo o luz de descanso?
Si hablamos de iluminación cálida, es el espacio de vida más ideal e incluso la misma comodidad. Las luces neutras son adecuadas para actividades que requieren concentración en el hogar: cocinar, leer, trabajar desde casa, etc. Si hablamos de luz fría, que normalmente ilumina espacios como cuartos de lavado, este tipo de iluminación es excelente para detectar manchas en la ropa que a menudo son más difíciles de quitar.
Nos permite crear espacios y escenas incluso en la misma estancia. Imagina cambiar las luces de una habitación para hacer más de una actividad: desde el trabajo y el estudio hasta nuestro cine en casa, luego a una sala de juegos de mesa los sábados por la noche; con iluminación inteligente, podemos hacer cualquier cambio en la luz.